Muffins de chocolate

CUIDADO!!!! 

Antes de empezar con la receta aviso a todas aquellas personas que estén en plena operación bikini (incluida yo) no sigáis leyendo, dejarlo aquí, huir corriendo si es necesario, si no lo hacéis, el peligro ha llamado a tu puerta o más bien ha entrado, si continuáis leyendo aparecerá en vosotros/as una necesidad inexplicable de ir a comprar los ingrediente o peor aún de mirar en casa si los tenéis y si es así, no podréis evitarlo, tendréis que hacer estas muffins y ahora viene lo peor de todo.... TENDRÉIS QUE PROBARLAS, y después de eso ya no hay nada que hacer.

Para todos aquellos a los que le gusta el riesgo, os presento la receta de uno de los mejores desayunos del mundo.



Ingredientes (12 unidades)

325 gr harina
120 gr mantequilla 
1/2 c.c (cucharadita de café) de sal
2 huevos
150 gr azúcar
150 gr chocolate cortado en trocitos + 180 gr chocolate cortado
180 ml leche
2 c.s (cucharadas soperas) zumo de limón
1 sobre levadura
110 gr pepitas de chocolate (negro, con leche, blanco....; mil opciones y todas buenisimas, yo he usado unas de chocolate negro)


Preparación

Mezclar la leche con el zumo de limón y reservar.

Derretir 150 gr de chocolate con la mantequilla en el microondas o al baño maría (yo siempre lo hago en el micro es mucho más rápido), dejar enfriar un poco, añadir el azúcar y remover.

Tamizar en un bol amplio la harina, la levadura y la sal.

Añadir la mezcla anterior al chocolate con la mantequilla y el azúcar después de haber puesto los huevos y la leche reservada y remover hasta obtener una mezcla homogénea y cremosa.

Poner el chocolate cortado que nos quedaba y las pepitas de chocolate y mezclar con una espátula.

Rellenar las cápsula (aproximadamente 3/4 de su capacidad) y hornear durante 20-25 minutos a 180º C, con el horno previamente calentado. 

Sacar del horno y dejar enfriar sobre una rejilla.

Y..... a comer!!!

Nota: lo mejor para hacer muffins y magdalenas es tener un molde de horno con cavidades donde encajen las cápsulas, así durante el horneado no perderán nunca la forma.
  

De cucharas y cucharillas